Una vez más me encuentro sentado, solo, en la montaña,
la sombra comenzó, poco a poco, con su canto nocturno,
ese canto que logra despertar los tristes recuerdos de mi infancia
sepultados en lo profundo de mi corazón
La pequeña niña de aquella cabaña se siente feliz al escuchar aquel canto,
siempre que lo oye, sale de su hogar para comenzar a saltar en la ribera del río.
Mientras, yo la observo, con ojos cristalinos...
¿quién no hubiera deseado haber sido así de feliz cuando pequeño?
El aliento gélido invade mi rostro,
el canto conformados por varias voces...
cada voz con su propia importancia...
y mi voz ¿ que importa ?
El canto nocturno que resuena en la montaña
que despierta en las personas
lo más íntimo de su ser
Dime, viajero....¿qué te ha producido el canto nocturno?